Ser sindicalista en el FSOC (Frente Sindical Obrero de Canarias) significa asumir un compromiso de lucha de clase y de defensa firme de la dignidad de la clase trabajadora canaria. No se trata solo de representar a las personas trabajadoras, sino de militar por la transformación social y laboral desde una posición combativa, asamblearia y no pactista con el poder económico ni político.
¿Qué implica ser sindicalista en el FSOC?
1. Independencia de clase
- En el FSOC no hay connivencias con partidos, patronales que condicionen la acción sindical.
- El sindicalista del FSOC responde únicamente a la clase trabajadora y al FSOC. No se vende ni se calla.
2. Lucha combativa y directa
- Ser sindicalista en el FSOC es estar en pie de lucha todos los días, en la empresa y en la calle.
- Se practica la acción directa, la movilización, la denuncia pública y la confrontación legal o política cuando sea necesario.
3. Democracia sindical desde las bases
- Se trabaja desde la asamblea, la horizontalidad y la participación real.
- No hay cúpulas desconectadas: el sindicalista es uno más del colectivo, pero con mayor responsabilidad.
4. Compromiso ético y militante
- No se es sindicalista solo en horario sindical: se es las 24 horas, los 365 días.
- La coherencia, la transparencia y el ejemplo son valores imprescindibles.
5. Formación y conciencia de clase
- El sindicalista en el FSOC se forma políticamente, legalmente y socialmente, porque entiende que solo con conciencia se puede transformar la realidad.
Ser sindicalista en el FSOC es:
🔴 No pedir permiso para luchar.
🔴 Decir la verdad aunque moleste.
🔴 Estar al lado del último, del precario, del invisible.
🔴 Defender lo colectivo por encima del interés individual.
🔴 Romper con el modelo sindical vendido y domesticado.
🔴 Tener una visión canaria y de clase: el sindicalismo del FSOC no se arrodilla ante Madrid ni ante Bruselas.
En resumen:
Ser sindicalista en el FSOC es estar al pie del tajo, con la frente en alto, sin pedir permiso para luchar. Es no pactar con la miseria ni aceptar migajas. Es no olvidar de qué lado estás: el de los trabajadores y trabajadoras.
No hay comentarios aún, deje su opinión gracias